Monterrey, Nuevo León, 04 de octubre de 2020. El actual proceso de designación del Comité de Selección es una simulación por parte de las diputadas y diputados que integran la Comisión Anticorrupción del Congreso local; una muestra más de que el Sistema Estatal Anticorrupción está capturado por los partidos políticos de Nuevo León.
Lo que hemos observado desde Consejo Cívico es un proceso viciado de origen, que no cuenta con una metodología de evaluación de los candidatos y candidatas, ni candados que garanticen que solo se estarían seleccionando a las personas idóneas al Comité de Selección, pues las entrevistas no reflejan la capacidad real de las personas candidatas para ejercer el puesto al que aspiran.
Dicho proceso arrancó de forma precipitada, en “fast track”, sin intención de realizar un escrutinio a fondo de los perfiles. Por lo tanto, desde Consejo Cívico desconocemos los criterios que serán utilizados por los diputados para integrar las ternas que serán presentadas al Pleno para su votación.
Es lamentable que al no tener una rúbrica de evaluación por parte de los diputados de la Comisión Anticorrupción para establecer quienes son los candidatos idóneos; podríamos anticipar que las personas aspirantes serán seleccionadas por “dedazo” pero simulando una votación transparente, cayendo en una dinámica de “cuotas y cuates” que prevalece cuando se trata de mantener el statu quo de los partidos políticos.
Ante este panorama, desde Consejo Cívico vemos un ejercicio sin ética ni profesionalismo por parte del diputado Jesús Gómez Reyes del PAN, Presidente de la Comisión Anticorrupción, quien en contubernio con los partidos mayoritarios y sus aliados nos dejan en evidencia que no tienen ninguna intención de llevar a cabo designaciones ejemplares.
Advertimos que el dictamen será enviado también en fast track al Pleno, que lo votará a inicios de la próxima semana. Probablemente incluirán a uno que otro de los mejores perfiles, para darse buena imagen, y desacreditar intentos de crítica. Al final, el resultado será que se dejará aplanado el camino para que un Comité de Selección amañado participe en la selección de nuevos fiscales también a modo, dando paso a la captura completa del SEANL.
Los partidos ganan, la ciudadanía pierde, la lucha contra la corrupción queda sepultada.